top of page

Hernia Lumbar

  • Dr. Emilio Barbarin
  • 16 abr 2017
  • 2 Min. de lectura

La hernia de disco es una enfermedad en la que parte del disco intervertebral se desplaza hacia la raíz nerviosa, la presiona y produce dolor, entonces es cuando puede hablarse de auténtica hernia discal.

Además, como presiona terminaciones nerviosas puede provocar trastornos de sensibilidad: hormigueos, alteración de la sensibilidad, etc. y trastornos motores: falta de fuerza, etc.

Cuando una persona tiene dolor de espalda, lumbago o ciática, el problema reside en la capacidad del médico para interpretar los síntomas y decidir qué hallazgos de la resonancia magnética o de TAC tienen importancia y cuáles no.

El tratamiento de la hernia discal debe ser realizado por un especialista en cirugía de la columna que tenga experiencia y criterio para indicar la idoneidad de la intervención quirúrgica.

El cuadro de la hernia discal suele ser agudo, repentino y violento en intensidad. Incluye síntomas propios de la ruptura discal y otros provocados por la presión de la hernia sobre la médula o los nervios.

Ni la natación ni ningún ejercicio es útil para prevenir, aliviar, o tratar una hernia discal de verdad. El dolor llega a ser tan intenso que, en general, no suele aliviarse con nada de lo que uno tiene en casa. Pero aún así, no hay que olvidar que hay otros muchos cuadros de dolor similar al de la hernia que no lo son. Si es hernia, los síntomas de dolor local agudo de espalda preceden o coinciden con los síntomas neurológicos (dolor ciático continuo hasta el pie, debilidad muscular, hormigueo...), el elemento distintivo de la hernia discal.

La ciática (dolor irradiado a la extremidad inferior) es el síntoma más característico, variando la distribución del dolor según el territorio que inerve cada raíz nerviosa afectada. Además causa dolor en la zona lumbar por la sensibilidad propia del disco.

El dolor es típicamente mayor al toser y al sentarse (por ejemplo, montando en coche) que al acostarse; suele ser mayor de pie quieto que caminando. Otro síntoma frecuente son las parestesias (sensación de hormigueo) en pierna y pie.

Puede dar lugar también a pérdida de fuerza en la pierna y en algunas ocasiones a incontinencia urinaria.

Si la indicación es correcta y la técnica de la cirugía discal se realiza cuidadosamente, se consiguen unas tasas de éxito superiores al 85-90%. Es importante dejar claro que en la cirugía de la hernia discal es más probable que mejore el dolor irradiado a la extremidad inferior que el dolor lumbar.

Todas las cirugías conllevan un riesgo de complicaciones, tales como infección y hemorragia. Aunque algunas cirugías espinales llevan riesgos adicionales, como lesión del nervio, alteración de esfínteres o fuga de líquido cefalorraquídeo, la mayoría de las cirugías espinales se las considera hoy bastante seguras.

La mayoría de las cirugías de hernia discal se pueden realizar sin implantes, lo que disminuye algunas complicaciones y riesgos.

Es importante que sepas que esta patología y su manejo son el más exitoso de los tratamientos de columna vertebral.

 
 
 

Entradas recientes

Ver todo

Comments


Featured Posts
Vuelve pronto
Una vez que se publiquen entradas, las verás aquí.
Recent Posts
Archive
Search By Tags
Follow Us
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square

Citas al 55 3403 9038 y WhatsApp 55 1007 1319

Citas CHS Esmeralda al 55 3403 9038

CHS Esmeralda  y Corporativo Hospital Satélite

  • facebook
  • twitter

©2016 BY DR. EMILIO BARBARIN RODRIGUEZ.

bottom of page